Canon ha presentado su último modelo, la MS-500, una cámara no infrarroja de alta sensibilidad que promete cambiar el juego en seguridad y vigilancia. Equipada con un sensor SPAD de 3.2 megapíxeles, el más avanzado hasta la fecha, esta cámara permite tomar imágenes a color con una luz tan tenue como 0.001 lux, equivalente a un cielo sin luna. Diseñada para aplicaciones de alta seguridad, como monitoreo en puertos, infraestructuras públicas y fronteras nacionales, la MS-500 tiene un precio de alrededor de $25,000 solo para el cuerpo.
Lo más impresionante es que, cuando se combina con las lentes de zoom de transmisión ultra telefoto de Canon, puede capturar videos en color nítidos de sujetos a varios kilómetros de distancia, incluso durante la noche. Además, utiliza perfiles de imagen especiales para reducir el ruido causado por perturbaciones atmosféricas a larga distancia.
Lo que realmente hace que esta cámara sea especial es su sensor SPAD, que emplea una tecnología revolucionaria llamada “recuento fotográfico”. Cada partícula de luz que entra en un píxel se magnifica un millón de veces y se convierte en una señal digital. Cada fotón se cuenta individualmente, lo que elimina por completo la introducción de ruido, una ventaja clave de los sensores SPAD, según Canon.
No se equivoquen, esta cámara de alta gama tiene un precio elevado, pero su tecnología promete un futuro emocionante para la imagen y la fotografía profesional. El avance del sensor SPAD y la eliminación del ruido podrían abrir nuevas posibilidades en la industria de la fotografía para los consumidores y los profesionales por igual.
Canon ha dado un gran paso hacia el futuro de la imagen con su MS-500, y estamos emocionados de ver cómo esta tecnología revolucionaria se filtrará a lo largo del tiempo en dispositivos más accesibles para todos.
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