Microsoft está a punto de cerrar oficialmente su histórica adquisición de Activision Blizzard y King por 68,700 millones de dólares, después de superar las investigaciones de varios organismos antimonopolio en el Reino Unido, Estados Unidos, Europa, Asia y otras regiones. La Comisión Europea ha decidido no revisar nuevamente la compra, a pesar de que inicialmente había expresado preocupaciones. Esta decisión se basa en los cambios que Microsoft realizó para satisfacer las preocupaciones de la Autoridad de Competencia y Mercados del Reino Unido (CMA), que inicialmente bloqueó la operación debido a preocupaciones sobre el mercado de juegos en la nube. Uno de los cambios significativos fue ofrecer los derechos de streaming a Ubisoft +, lo que le valió una aprobación provisional de la CMA. Con la CMA lista para otorgar una autorización definitiva, se espera que Microsoft cierre la compra en breve, a pesar de la oposición de la FTC de Estados Unidos, que parece tener pocas posibilidades de detenerla en este momento.