La Electronic Entertainment Expo, E3, que durante más de dos décadas fue el epicentro de la industria de los videojuegos, ha sido oficialmente cancelada, según anunciaron los organizadores el martes. La Entertainment Software Association (ESA), grupo comercial detrás del evento, comunicó la decisión a través de X, antes conocido como Twitter.
Esta cancelación llega después de que la edición de este año fuera suspendida meses antes de su programada apertura en el Centro de Convenciones de Los Ángeles en junio. Esta edición habría marcado el retorno del E3 al recinto de convenciones desde 2019, cuando la pandemia obligó a trasladar el evento al ámbito virtual.
Antaño considerado como el principal evento de la industria de los videojuegos en América del Norte, el E3 ha enfrentado desafíos en los últimos años, con grandes desarrolladores como Sony optando por organizar eventos propios más enfocados en los fanáticos. La ESA había revelado anteriormente que el E3 generaba más de $88 millones en ingresos para Los Ángeles y atraía a más de 65,000 asistentes entre fanáticos y profesionales de la industria cada verano.
La exposición, que solía centrarse en la venta minorista, enfrentó dificultades con la transición a las tiendas digitales y el aumento de eventos en línea centrados en avances, lo que llevó a la decisión de poner fin al evento emblemático.