Intel ha sorprendido al mercado al anunciar una inversión estratégica en Arm, uniéndose a gigantes como Samsung, Alphabet y Nvidia. Esta jugada llega en vísperas de la esperada Oferta Pública Inicial (OPI) de Arm, donde Softbank planea ofrecer 95.5 millones de acciones a un rango de precio entre $47 y $51 por acción, valorando la compañía en $52 mil millones. Esto la hace aún más valiosa que el acuerdo previo con Nvidia por $40 mil millones, el cual colapsó en 2022 debido a obstáculos regulatorios.
Esta inversión permite a Intel expandirse más allá de sus tradicionales chips x86, que enfrentan desafíos de eficiencia frente a la tecnología Arm. Stuart Pann, VP Senior de Intel Foundry Services, afirmó su compromiso con Arm, destacando la importancia de trabajar con ellos en el negocio de fundición. Intel, como “inversor principal”, obtendrá acceso privilegiado a la propiedad intelectual de diseño de chips Arm, fortaleciendo su posición en el mercado.
Además, Intel planea enfocarse en conjuntos de chips de bajo consumo de energía, como RISC-V, para competir en el mercado de dispositivos móviles. Esta movida estratégica llega en un momento de crecimiento significativo en la industria de fabricación de chips, respaldada por iniciativas de financiamiento gubernamental y la renovada asociación de Apple con Arm hasta 2040. La industria de los semiconductores está en plena ebullición, y Intel se asegura de no quedarse atrás.