El presidente Donald Trump ha decidido suspender temporalmente la ley que prohibía TikTok en Estados Unidos, aprobada durante los últimos días de la administración Biden. Mediante una orden ejecutiva firmada al asumir su segundo mandato, Trump concedió un periodo de 75 días para reevaluar las implicaciones de seguridad nacional y política exterior de esta medida.
En su declaración, Trump justificó la pausa señalando que necesita tiempo para analizar información de inteligencia relacionada con los riesgos que, según críticos, representa la popular aplicación. Además, evaluará si las medidas implementadas por TikTok, como el Proyecto Texas, son suficientes. Este proyecto trasladó los datos de los usuarios estadounidenses a servidores gestionados por Oracle, como parte de un esfuerzo de años para cumplir con las exigencias del Comité de Inversión Extranjera en los Estados Unidos (CFIUS).
El sábado por la noche, TikTok y otras aplicaciones de ByteDance dejaron de funcionar brevemente antes de que la prohibición entrara en vigor el domingo. Sin embargo, tras la orden ejecutiva de Trump el lunes, el servicio se reanudó gradualmente. El mandatario también propuso la creación de una empresa conjunta que otorgue a inversores estadounidenses el 50 % de participación en TikTok.
China, por su parte, mostró apertura para negociar un acuerdo que permita la operación de TikTok en Estados Unidos a largo plazo. El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Mao Ning, enfatizó que estas decisiones deben respetar las leyes del mercado y las regulaciones chinas.
Aunque Trump intentó prohibir TikTok durante su primera administración, sus esfuerzos no prosperaron. Ahora, el tema sigue siendo un punto de tensión entre Estados Unidos y China, con un desenlace aún incierto.
