Valve sorprende al retirar múltiples videojuegos de su plataforma Steam debido a problemas de derechos de autor relacionados con el uso de arte generado por inteligencia artificial. Según declaraciones oficiales de la compañía, Valve está aprendiendo sobre las implicaciones legales de la IA y su aplicación en el desarrollo de juegos.
Su prioridad sigue siendo distribuir la mayor cantidad posible de títulos, pero la introducción de la IA ha generado incertidumbre en cuanto a los derechos de los desarrolladores sobre los activos generados. Valve está estudiando cómo integrar la IA en sus políticas de revisión existentes, que se ajustan a las leyes y políticas de copyright vigentes. Si bien se alienta la innovación y el uso de la IA con las licencias adecuadas, infringir los derechos de autor sigue siendo inaceptable para la compañía.